19 febrero 2009

DUELO NACIONAL

El conjunto compatriota goleó 3-0 a u similar de Paraguay, por el Grupo 3 de la copa Libertadores, y quedo muy bien encaminado para clasificar a la siguiente fase.

Orden, efectividad y contundencia.
Esos fueron algunos de los adjetivos que marcaron el juego de Nacional de Uruguay la pasada noche ante su similar de Paraguay, por el Grupo 3 de la Libertadores.
Justamente, todo eso que tuvo el conjunto "charrúa" fue lo que le faltó al equipo "guaraní".
Es que Nacional hizo todo muy simple a lo largo de los noventa minutos y se llevó un triunfo importantísimo que lo deja bien parado para lo que se viene.
A los nueve minutos de comenzado el partido, ya vino el primer grito de la noche, luego de la buena definición de Alvaro Fernández dentro del área.
Los visitantes ya habían mostrado algunas mejoras en el juego, pero hasta ese momento todo estaba muy equilibrado.
El tanto de Nacional inclinó la balanza a su favor, mientras que los dirigidos por Daniel Raschle intentaban igualar, pero chocaban con el arquero Burián, gran figura del encuentro.
Después llegó el segundo de Nacional de Uruguay en los pies de Nicolás Lodeiro, quien dejó en el camino a Ignacio Don y definió de zurda con el arco vacío.
La suerte no le jugaba una buena pasada al conjunto guaraní (tuvo dos remates que dieron en el palo).
Ya en la segunda etapa, los hombres de Gerardo Pelusso tardaron casi 15 minutos en liquidar el encuentro, gracias al tanto de Marcos Mondaini.
Después tuvo varias jugadas para aumentar el marcador, pero no tuvo la efectividad que mostró en la primera parte.
Los paraguayos, en cambio, se quedaron con las manos vacías y muy complicados para clasificarse a los octavos de final de la Copa Libertadores.

CON CAMISETAS COMPRADAS EN EL SHOPPING:
Nacional estrenó ropa en Asunción, pero lo más llamativo fue que la camiseta, roja, sin publicidad más que la marca de la indumentaria, con números azules y con un diseño antiguo en la zona de su cuello (tenía cordones), no lució el escudo.
La razón fue que en realidad no era la casaca original, sino un juego comprado en un shopping local pues les fueron hurtadas o extraviadas las que llevó.
De apuro les estamparon los nombres, pero no hubo tiempo de ponerle el escudo.

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