POR JORGE SUAREZLuego de una breve conferencia, el atacante salió a la cancha, donde los hinchas lo recibieron con champaña.
Apenas aparece el atacante, se escucha el himno de Corinthians y se lanzan algunos fuegos artificiales.
Toda una fiesta para el gran fichaje de la temporada en Brasil.
Brasil sigue en revuelo con la llegada de Ronaldo a Corinthians.
Un evento que estuvo marcado por la pompa que le imprimió la dirigencia del "Timao", que ya habla "del fichaje del siglo".
La conferencia acaparó la atención de todos los medios brasileños, que no son pocos.
De hecho, el departamento de prensa de Corinthians recibió 440 solicitudes de acreditación para el evento de prensa local e internacional.
De esta cifra sólo fueron aceptados 118 profesionales.
En una gran sala, con toda la cobertura de prensa más la presencia de varios hinchas del "Timao" comenzó un verdadero evento marcado por el simbolismo.
Apenas Ronaldo ingresó al Parque San Jorge, se escuchó la sirena del recinto que sólo suena para eventos especiales.
De hecho, la última que se había escuchado fue en 2005, cuando la escuadra brasileña fichó a Carlos Tevez.
Acto seguido, la dirigencia del "Timao" repartió copas con champaña para efectuar un brindis por la llegada del "Fenómeno".
Toda esta ceremonia estuvo precedida de una reunión de la directiva corinthiana con ejecutivos de Nike para cerrar los detalles del plan de negocios que se seguirá con la llegada del atacante.
Ya en la sala de prensa, las primeras palabras de Ronaldo con la camiseta del "Timao" fueron:
"Con certeza mi hijo está contento, porque su padre jugará en Corinthians.
Estos es lo que más me agrada de esta transferencia, junto con la tranquilidad que el club le da a mi retorno al fútbol".
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