Uruguay logró un meritorio empate ante Ghana sobre el final después de ir perdiendo por dos a cero y seguramente se las vea con Brasil. Los celestes tuvieron un arranque de segundo tiempo para el olvido que les costó muy caro.
Luego de un primer tiempo muy pobre, donde habían comenzado mejor, se fueron quedando y dejando el balón en poder de los africanos.
En la última de la primera parte le anularon bien un gol a Hernández, pero parecía que la Celeste iba a volver a la cancha con otra cara.
Sin embargo, fueron los africanos los que volvieron a tomar el control del balón y se encontraron con el primero luego de un zapatazo de Rabiú cuando transcurrían nueve minutos.
La Celeste necesitaba dos goles para ser primera del grupo, pero seguía muy nerviosa.
Los africanos ganaban justamente por dos goles y con espacio podían hacer mucho daño; sin embargo en una jugada confusa llego el descuento de Nicolás Lodeiro, tan solo a cuatro minutos del segundo.
El envión del descuento llevó a que la Celeste se adelantara en la cancha, en el primer minuto de descuento llegó el empate de Abel Hernández, que sirvió para mantener el invicto y darle confianza al ex Peñarol, que venía con la moral baja.
Si bien no se logró el objetivo y no se jugó bien, hay que destacar las ganas que le pusieron los pibes celestes, que nunca dejaron de ir en busca de la victoria.
Al final del encuentro las caras de los jugadores demostraban la frustración.
Uruguay deberá mudarse a Port Said, donde se medirá con el ganador del Grupo E, que por ahora es Brasil, con quien supimos ganar y perder en el Sudamericano de Venezuela.
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